martes, 24 de marzo de 2009

Doble mensaje de paz

Aquel domingo habíamos quedado en ir mi esposa, mi mamá y yo a desayunar con mi cuñado y su esposa. Yo tenía muchísima hambre pero me consoló que estábamos ya muy cerca del restaurante, a unos metros antes de llegar al crucero en el que habríamos de dar vuelta a la derecha. Mientras nos detuvimos a unos seis autos de la luz roja del semáforo, vimos que un par de niñas bien vestidas se acercaban a las ventanillas de los conductores, intercambiaban palabras y en algunas ocasiones alguna niña corría hacia la banqueta con quienes parecían sus papás (que también se veían bien vestidos) y estos le daban un envase de pintura líquida de color blanco para bolear zapatos…

La niña corría con alegría de regreso hacia el auto cuyo dueño habría autorizado lo que vi a continuación: Con aquella maestría que dan tres horas de estar haciendo lo mismo, la niña escribía “PAZ” en el medallón del auto, que para quienes no estén familiarizados con el término, el medallón es el vidrio grandote de atrás del auto y no sólo un recurso del doble sentido. Algunas veces también les pintaban el clásico ícono de “Peace and love” y cuando la niña terminaba de dejar aquel mensaje corría al auto de atrás mientras que la otra niña quien supongo sería su hermana hacía lo mismo en otro.

A mí me pareció agradable la idea. El hecho de que una familia de clase media o incluso media-alta salieran a convivir esparciendo un mensaje tan positivo y contrastante con la realidad me pareció fantástico e incluso tengo qué confesar que cual niño pequeño pensé “Espero que nos toque”…

De pronto durante lo que serían los últimos segundos de la luz roja, la niña más pequeña se acercó a la ventana que mi esposa ya había abierto y después de escuchar su vocecilla diciendo ¿Le puedo pintar un mensaje de paz? y de ver el tamaño de su sonrisa y el brillo de sus ojos, le devolví la sonrisa y le dije que sí.

Como un bólido la niña se paró atrás de mi auto y en ese momento vimos que la luz se puso en verde. Yo me decidí a darle todo el tiempo que necesitara, aunque noté a la niña bastante apurada por el cambio de luz y al ver que los autos empezaban a avanzar. Como pudo destapó el envase de pintura blanca y escribió rápidamente las tres letras de la palabra paz. Para entonces yo ya no tenía autos adelante, pero seguía detenido. En eso la niña corrió hacia la ventana donde estaba mi esposa y con noble gesto de agradecimiento nos dio las gracias. Yo le iba a responder “no, gracias a ti” cuando de repente como si fuera un trompo giró rápidamente y al tratar de correr hacia sus papás se resbaló o se tropezó con algo. Sólo alcanzamos a ver las dos coletas de mechones güeros precipitándose hacia el piso y el ruido típico que hacen los niños cuando caen al piso.

Paz decía el medallón de mi auto y ¡paz! sonó la niña… Fue un doble mensaje de paz, dije a mi esposa y a mi suegra sin poder contener mi humor negro… Y nos reímos mucho pero a la vez pensamos que no había sido justo… A la gente no le deberían de pasar esas cosas cuando hace cosas buenas.

Lo único que espero es que los padres de la niña no hayan pensado que nosotros éramos gente bélica, amargada, intolerante y que manifestamos el repudio hacia la paz empujando a las niñas con peinado de coletas hacia el pavimento, porque somos incapaces de hacer algo así… Al menos los domingos y en ayunas.

- el güey de junto -

4 comentarios:

MIG dijo...

Ahh que chido que haya gente haciendo eso... es muy buena idea... y si pobre de la niñita XD saludos

Cheryl dijo...

Jajajaja cuando leí el título de tu historia, casi casi pude sentir la atmósfera navideña (aunque a destiempo). Pero cuando leí sobre el "doble" mensaje de paz... tsssssss no sabes las carcajadas que salieron de mi boca.

Gracias por eso!

Saludos.

Rodrigo dijo...

jajajaja te vas ir al infierno por culeyy

Anónimo dijo...

jajajaja ay Dios! perdí el sentido del tema cuando la niña cayó,sorry. Lo importante es reaccionar sin necesidad de detonantes, porque muchos de estos movimientos los hacen una vez que hemos sufrido los estragos de la maldad humana. Saludos!
P.D. Ahora sé de quien se me pegó el humor negro ultimamente mmmm, luego te cuento por qué
Kitty♥