miércoles, 19 de marzo de 2008

Pasajeros vacacionistas... ¡Lo que nos faltaba!

Poco movimiento en el vagón. Muchos asientos vacíos y mucho polvo en el pasillo. Durante esta semana no se han visto los clásicos arrimones al prójimo al momento de subir y bajar en cada estación y la razón es simple... Los pasajeros habituales andan de vacaciones disfrutando de distintas clases de excesos:

Hommo Cannabis anda en un viaje cósmico por exceso de mota y sus derivados. Khaos seguramente anda con exceso de... ¿Caos?... (O ¿qué más podríamos esperar de él?). La Diva Enmascarada debe estar atendiendo a sus hijos y nietos que la visitan (porque aunque Usted no lo crea, sí hay quien la visita). Reporneta con exceso de entrevistas informales a sus camaradas y compañeros de causa, al calor de las copas, por supuesto. El Grinch con exceso de... Bueno, el Grinch apático como siempre, sentado en el sillón de su casa leyendo el periódico y quejándose del mundo. Lucheff con exceso de labores en la cocina (hay mucho qué limpiar después de un semestre de idear y cocinar recetas para nosotros. Lucho Fertón con exceso de... Ja! Más bien con escasez de ventas, por lo que anda taloneando duro antes de venir a presentarnos algún nuevo producto. El Pobresor actualizándose de las líneas y letras más sublimes e ingeniosas recientemente publicadas. Luchógrafo con exceso de hueva. Super cholo... A ese cuate ya lo debe haber agarrado la migra, pues hace un buen que no se sabe de él...

Esperemos que este próximo lunes el cauce de gente vuelva a la normalidad y tengamos a la gente de siempre cotorreando con el resto de la banda. De igual manera esperamos a más gente curiosa que anda visitando el vagón por primera vez.

¡Saludos! y ¡Aguas con los excesos!

- el güey de junto -

1 comentario:

W Garcia dijo...

Recién subo al vagón, cuando ya daba el timbrazo antes del portazo exprime-maletas. A mi edad, ya no saben igual ni los cigarros, ni las recetas, pero siempre cae bien compañía para saborear el amargo pan nuestro de cada esquina.
Un saludo a todas mis conocidas en ese eje no del mal, sino del ex-cesxo... ya ven, a mi edad, nomás platicar.